¿Cuál es la edad mínima para abrir una cuenta bancaria?
La ley marca los 18 años como edad mínima para convertirse en titular de una cuenta bancaria. A partir de esta edad los jóvenes pueden abrir y gestionar una cuenta de forma totalmente independiente. Pero abrir una cuenta para niños menores también es posible. Eso sí, son los padres o el tutor legal los que deben solicitarla. Veamos un poco más sobre a qué edad se puede abrir una cuenta bancaria.
Nacer y tener ya una cuenta bancaria es posible
Abrir una cuenta bancaria cuando nace un hijo es un acto simbólico que practican miles de familias cada año. ¿El objetivo? Preparar de antemano la financiación de los futuros gastos que vendrán.
Unos ahorros para el futuro de los niños
Una cuenta bancaria es un buen medio para depositar dinero en un lugar seguro y establecer un plan de ahorro. Esto ayudará a tus niños a comprender más adelante el valor del dinero y la gestión financiera. Además tiene otras ventajas. También podrán pagar futuros gastos como el permiso de conducir, la universidad, su primer coche o ingresar sus primeras nóminas.
Ahora bien, ten en cuenta que no todos los bancos ofrecen esta posibilidad. Algunos sólo permiten abrir una cuenta a partir de los 10 o 12 años. Pero no te preocupes, en general las grandes entidades sí lo permiten.
Unos requisitos simples y unas características ventajosas
En cuanto nazca tu bebé, puedes abrir una cuenta bancaria de ahorro a su nombre. Sus características son parecidas en casi todas las entidades. Generalmente son cuentas gratis, sin mantenimiento ni comisiones, y con una cierta rentabilidad. Evidentemente tampoco tienen una tarjeta de débito o crédito asociada.
Sólo los padres o tutores legales pueden abrir una cuenta. Además, son el titular legal y los responsables de ella. Ten en cuenta que tu hijo no podrá acceder a la cuenta hasta que tenga 12 años. Antes de esa edad, los menores no tienen poder sobre sus finanzas. Sólo sus tutores legales pueden utilizar el dinero, siempre que los gastos estén directamente relacionados con ellos.
Todo un mundo de posibilidades a partir de los 12 años
A partir de esta edad muchos bancos abren un abanico enorme de posibilidades para los niños menores. Además de cuentas de ahorro, muchas entidades ofrecen cuentas corrientes que permiten a los jóvenes aprender a gestionar sus finanzas.
Cuentas más interesantes e igualmente seguras
Como antes, la cuenta deben abrirla los padres o tutor legal. Igualmente, todas las transacciones siguen estando vigiladas por ellos, muchas veces a través de una app móvil. Aunque apenas tienen rentabilidad, es una buena solución para que los niños sean más responsables.
Estas cuentas corrientes o de ahorro tampoco tienen comisiones ni gastos de mantenimiento. Algunas entidades dan una tarjeta de débito con saldo para pagar cosas y retirar dinero en cajeros. También ofrecen una app con la que gestionar la cuenta. Sin embargo, cualquier retirada o ingreso de dinero requiere la firma de los padres.
Pixpay, una alternativa a los bancos tradicionales
El dinero, como el móvil, forma parte de la vida diaria. Cada vez más a una edad temprana. Muchos niños comienzan a esta edad a recibir una pequeña paga y acceder a un móvil. Pixpay ofrece a los menores una tarjeta para gestionar su dinero de bolsillo y sus gastos. Los padres pueden controlar su gestión a través de una app con orientación totalmente parental.
El objetivo es ofrecer a los menores una especie de monedero digital, que pueda ser controlado y supervisado por los padres. La suscripción es online por 2,99 euros al mes, sin compromiso. De este modo, puedes iniciar a tus niños en la gestión de cuentas a una edad temprana.
Preparando la mayoría de edad y el acceso a una cuenta independiente
Llega una edad en la que todos los jóvenes comienzan a demandar, y necesitar, más independencia. Y esto tanto a nivel personal como económico. Normalmente es a partir de los 15 o 16 años. El momento definitivo, si no lo has hecho ya, de abrir una cuenta bancaria para tus hijos.
Ahorrar y pagar con tarjeta con una cuenta bancaria a partir de los 16 años
Los padres y tutores legales siguen siendo los únicos autorizados a abrir una cuenta para menores. Ahora bien, a partir de los 16 años, el menor puede ser ya titular de la cuenta y sus padres los representantes legales. Además los bancos ofrecen otros servicios de ahorro y acceso a gastos, como tarjetas de débito o crédito.
Los jóvenes adolescentes pasan a ser responsables de las operaciones y movimientos de saldo y cargos de su cuenta. Sin embargo, en caso de incidentes bancarios, los padres son responsables de las deudas de los niños. Para limitar este tipo de inconvenientes, algunas entidades financieras ofrecen tarjetas de pago con autorización sistemática.
Una cuenta bancaria propia y como único titular: ¡por fin 18 años!
¿Tus hijos han cumplido 18 años? La mayoría de edad conlleva nuevos derechos y responsabilidades. Ahora ya pueden abrir en cualquier sitio una cuenta de ahorro o corriente para su nómina sin el permiso paterno. Además, a través de la app móvil del banco, pueden decidir sus propios límites de gastos, saldo y retirada.
Como titular y usuario bancario, los jóvenes pueden pedir un crédito y usar sus tarjetas de crédito o débito libremente. Sin embargo, ya son adultos, así que si hay un problema serán ellos los que tengan que devolver el dinero al banco. Lo mismo ocurre con los préstamos.
Desde que nacen hasta que se convierten en jóvenes casi adultos, no hay edad a la que se puede abrir una cuenta bancaria infantil. Simplemente se aplican unos límites en el uso y disposición de la cuenta en función de la edad del menor. Pixpay es una solución ideal para que los menores se inicien en la gestión de su dinero y se preparen para la vida adulta. ¡Pruébalo!