Paga para un niño de 16 años: una buena herramienta para su educación financiera

A los 16 años las necesidades de los niños cambian radicalmente. Cada vez más independientes y con mayor gusto por la socialización, los jóvenes de 16 años necesitan más recursos económicos para el pago de sus gastos y para disfrutar de esa edad en la que todo es fácil y posible. Dar una paga a un niño de 16 años es importante para su educación como adulto, y una buena herramienta para que aprenda a gestionar su patrimonio. Fijar una paga con él/ella, la regularidad con la que la recibe e incluso establecer ciertas normas de uso y de ahorro son ideas excelentes para que los jóvenes empiecen a comprender ciertas nociones de la vida económica. Si, además, quieren completar la paga con unos euros extra, un trabajo de estudiantes o de verano puede ser una buena idea. Si necesitas ayuda para saber qué paga dar a un niño de 16 años y cómo usarla para su educación financiera, en Pixpay te damos algunas ideas. ¡Sigue leyendo!

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Paga para un niño de 16 años: objetivos y condiciones claras

Los criterios para fijar la paga a un niño de 16 años deben estar claros desde el principio, tanto para los padres como para los jóvenes. Dichos criterios son muy personales, ya que no todas las familias tienen los mismos valores ni la misma situación económica, y no todos los jóvenes tienen las mismas necesidades. Lo importante es que hables con tus hijos/as menores para fijar las reglas. Si tienes hijos de diferentes edades, hazlo de manera individual, ya que según la edad las cantidades que les atribuyes pueden variar. Fija unos objetivos y unas condiciones claras y utiliza la paga como herramienta para la educación financiera de los niños. Aquí te citamos algunas ideas: 

Un cálculo adaptado a la situación familiar y a sus necesidades

Antes de calcular las cantidades de euros que les vas a asignar a tus niños, es importante que evalúes vuestra renta familiar y los impuestos que pagáis como contribuyentes, así como las necesidades de tus hijos/as. Es importante fijar una serie de reglas o condiciones en cuanto al uso de esa paga, como cuáles son los gastos que van a pagar con su patrimonio y cuáles seguiréis asumiendo como padres. Fuera de las necesidades de alimentación, y los gastos fijos de cada hogar (electricidad, agua, su colegio o instituto si no están en la educación pública) …), los jóvenes deben saber, por ejemplo, si con su paga van a pagar su factura de teléfono, sus desplazamientos, su ropa… o si estos gastos los asumen los padres. 

En cuanto a las necesidades de los jóvenes de 16 años, lo mejor es hablar con ellos para evaluarlas, fijando una cantidad individual según lo que juzguéis necesario. Ten en cuenta que a esta edad los jóvenes salen más con sus amigos y tienen, en general, una vida social más importante. Sin embargo, la noción de necesidad no es la misma según la persona que la expresa, por lo que un buen diálogo con tu hijo/a es la mejor manera de llegar a un acuerdo. Si necesitas un poco de orientación, siempre puedes preguntar en tu entono o a los padres de sus amigos/as, sin que por ello tengas que hacer exactamente lo mismo. 

El objetivo de la paga: educación financiera y como ciudadanos responsables 

Según el último informe que publica PISA (Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos de la educación pública en la OCDE), un 16,5% de los estudiantes españoles de 15 años no alcanza el nivel básico de educación financiera, frente al 15,3% de media en la OCDE. Según el informe, la tendencia al ahorro depende de la información que reciben en casa, y añade que la recepción de una cantidad de euros semanal facilita el ahorro de los jóvenes. No obstante, siempre según dicho estudio, sólo un 16% de los estudiantes de primaria ahorra dinero en una cuenta bancaria, mientras que el 56% ahorra con el objetivo de comprarse bienes como juguetes, dispositivos tecnológicos o, en menor medida, para la universidad.
A través de la paga, puedes llevar a cabo una educación financiera, pero también una educación que les ayude a construirse como los ciudadanos responsables que serán en el futuro.
Tienen que entender que el objetivo de una paga no es gastarla de cualquier manera, sino asumir sus gastos y hacer un uso racional, ecológico y crítico de los euros asignados.

Una paga que les permita el ahorro

Los objetivos de la paga deben estar claros para todos. Aparte de los gastos que pagan con los euros que les atribuyes, puedes incitarles a que lleven a cabo un ahorro con vistas a una inversión más importante o a un proyecto individual.  Según el informe PISA, los estudiantes de secundaria van dejando atrás sus “inversiones” en juguetes para gastarse el dinero en viajes, estudios universitarios o financiarse el carné de conducir, por ejemplo. También son más conscientes del valor del dinero. El 84% de los encuestados para el estudio afirma comparar precios antes de comprar algo, en particular por Internet, una vía que utilizan el 12% de los estudiantes de secundaria.
De este modo, la paga debe permitirles pagar y ahorrar, punto importante para el cálculo de las cantidades. Puedes abrirle una cuenta de ahorro para menores, para que empiece a ahorrar un poco de dinero y aprenda lo que significa tener un patrimonio.

¿Cuándo y cómo dar la paga a un niño de 16 años?

Un punto importante que tenéis que abordar es cuándo darles la paga, es decir, ¿una vez a la semana o de manera mensual?  A los 16 años, una paga mensual puede ser una buena fórmula, aunque, si sientes que tu adolescente no está preparado para gestionar su dinero mensualmente, puedes seguir dándole una paga semanal. Todo depende de los gastos que deban pagar.

Otro punto importante es la manera de recibir los euros que has decidido darle. Se los puedes facilitar a través de una cuenta corriente o una cuenta bancaria para estudiantes, acompañada de su propia tarjeta de débito, o a través de una tarjeta de prepago, como la que propone Pixpay.
Las tarjetas de prepago Pixpay están dirigidas a jóvenes y niños a partir de 10 años, con la finalidad de que empiecen a gestionar sus ingresos y a ahorrar de forma autónoma, evitando que tengan que llevar dinero líquido encima. La tarjeta Pixpay no está asociada a ningún tipo de cuenta corriente o de ahorro, sino a una cuenta de recarga en la que, a través de una aplicación móvil, puedes recargar las cantidades que quieres darle como paga a tu niño de 16 años, pudiendo controlar al mismo tiempo el uso que hace de ella. Por sólo 2,99 euros al mes, los menores podrán ahorrar, comprar en tiendas u online y sacar dinero en cajeros de manera sencilla y práctica, sin ningún tipo de comisión ni obligación de permanencia. 

Trabajos de verano para estudiantes: unos euros extra y un buen aprendizaje

Si, una vez que habéis fijado la paga, tu hijo/a quiere tener un dinero extra y/o aprender, e incluso divertirse durante sus vacaciones, llevar a cabo un trabajo para estudiantes, durante los meses de verano o todo el año, puede ser una idea estupenda. Además, la buena noticia es que con 16 años ya pueden trabajar legalmente en España, teniendo acceso a unos ingresos más importantes, aunque eso sí, van a tener que familiarizarse también con conceptos como impuesto sobre la renta,  impuestos indirectos o contribuyentes, ya que tener una renta implica unos tributos a las arcas públicas.
Las ofertas de trabajos de verano para adolescentes de 16 años en España son muy abundantes, y son una forma estupenda de tener unos ingresos, ampliar su patrimonio y ahorrar para proyectos futuros. Además, trabajar en verano puede ser divertido y les permite ampliar su área de competencias, practicar una lengua, conocer gente y empezar un nuevo ciclo en su vida, el de un joven independiente. Sin embargo, dicho trabajo no tiene que interferir en sus verdaderos proyectos. Lo más importante es que puedan seguir invirtiendo en su educación y disfrutando de su vida de estudiantes.  Un trabajo puntual o a tiempo parcial puede ser un buen compromiso. 

¿Cuál es el importe más adecuado como paga a los 16 años?

El importe más adecuado para la paga de tu niño de 16 años es una decisión familiar que deber ser tomada teniendo en cuenta todos los factores de los que hemos hablado. Como orientación, te podemos decir que a esta edad las cantidades atribuidas suelen estar entre los 20-25 euros semanales, aunque, una vez más, todo depende del objetivo perseguido con la paga, de los gastos que tengan que asumir y de la economía familiar. Evalúa las necesidades de tus hijos/as, pero cuidado con subestimarlas, ya que una paga demasiado baja podría crear en tu adolescente un sentimiento de frustración que no es fácil de gestionar a esta edad. Puedes incitarle a llevar a cabo ciertas tareas en el ámbito familiar que puedes remunerar, es otra manera de facilitarles una paga fijando un poco más de valor a la acción.

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