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¿Tu niño adolescente ya no quiere salir con vosotros? Bueno, es normal. Tiene 14 o 15 años y con la adolescencia los niños empiezan a pedir más autonomía. Es el momento en que ya los puedes dejar quedarse solos en casa sin supervisión. También esto va a suponer un alivio para muchos padres, que con su trabajo apenas pueden estar presentes. Aprende en este artículo cómo dejar adolescentes solos en casa.

Dejar a los niños solos en casa, ¿es legal?

Explícitamente, la ley española no dice a qué edad puedes o no dejar a tus niños menores solos en casa. Lo que sí dice el código legal es que no puedes dejar a personas dependientes solas en el hogar (en situación de desamparo) sin supervisión. Por ejemplo, ¿debemos dejar a un bebé solo en casa? Es peligroso, ¿no? En esta situación, esto se considera abandono y desamparo y los progenitores sí pueden tener un problema legal y perder, incluso, la guarda del bebé.

En fin, el sentido común de los progenitores es lo que marca el código legal cuando se trata de un bebé o niño pequeño. Pero en el caso de los adolescentes, esto varía en función de los años de los niños, de su madurez y educación. A esta edad los adolescentes pueden quedarse solos en casa. La mayoría no necesita asistencia, solo un teléfono o juegos online para pasar el día…

Un proceso que se desarrolla con los años

Al principio los progenitores tienen miedo de dejar al bebé o niño solos. Piensan que los niños van a tener miedo de su ausencia y que en todo momento necesitan asistencia y supervisión para evitar accidentes. Pero siempre llega un momento en que tendrás que dejarlos solos. Para evitar, precisamente, que los niños se sientan inseguros en estos casos, necesitan educación y acostumbrarlos desde su edad infantil.

Pon a tus niños en esta situación desde pequeños. Empieza, a partir de los 9 o  años, dejándolos solos en el hogar unos minutos al día. Ve aumentando poco a poco este tiempo y compagínalo con una canguro o algún familiar. Los niños no sentirán abandono y la canguro les ofrecerá asistencia, supervisión y contacto en caso de accidentes.

Con un proceso gradual, tus niños menores irán ganando la madurez necesaria y una educación para cuando deban quedarse solos en casa. Finalmente, cuando sean niños adolescentes, los progenitores los podrán dejar solos tranquilamente en casa sin miedo a accidentes en su ausencia. ¡Padres y adolescentes podrán disfrutar de su autonomía!

Comunicación y confianza, claves para dejar a un adolescente solo

Al final todo es más sencillo de lo que parece. Y con los años los intereses de los progenitores y los niños adolescentes confluyen. Va llegando un momento y situaciones en las que la ausencia de los padres del hogar es necesaria por sus deberes, y el adolescente va ganando en autonomía.

 

Dar confianza para desarrollar la madurez del adolescente

Cuando son más pequeños, los niños menores que se quedan solos en el hogar pueden sentir miedo o abandono de sus progenitores. Pero a veces es la causa de la asistencia y supervisión constante, y el miedo a accidentes, de sus progenitores. Para evitar esto, desde su edad infantil hasta la adolescencia hay que dejarlos solos de vez en cuando. Para que ganen en confianza, simplemente ponte en contacto con ellos por teléfono y así verán que no corren peligro.  

Además hay muchas situaciones en las que puedes dejar solos a tus niños. Por ejemplo, mientras hacen los deberes de sus cursos, o si están entretenidos con juegos online. Después, pregúntales qué les ha parecido la experiencia. Y por lo que no ha ido bien, buscáis juntos otra solución. El adolescente sentirá que sus padres creen en él, ganará en madurez y tanto ellos como los padres, en autonomía.

 

Comunicar y observar

El momento llega de manera natural. Un día, el niño adolescente preguntará si lo pueden dejar solo en casa e invitar a sus amigos. Pero para su necesaria autonomía, los adolescentes también necesitan la ayuda de sus progenitores. Como padres, debemos comunicar con ellos y escucharlos. Y poner algún tipo de “código legal”. Por ejemplo, discute con ellos cuántos amigos pueden venir a casa, hasta qué hora o a qué teléfono llamar en caso de accidentes.

Después, observa cómo ha ido tu ausencia del hogar. Dialoga con tu niño sobre el momento y establece nuevos acuerdos adaptados. Si todo ha ido bien, podrás premiarle y quedarse solo en otras situaciones más a menudo. Es bueno para su educación y autonomía ver que sus progenitores tienen confianza en él.

Organización para que todo salga bien en tu ausencia

Organiza bien los momentos en los que podrás dejar a tus niños adolescentes solos en casa. Mirad juntos el horario semanal para establecer en qué momento y situaciones podrán quedarse solos. También hablad sobre lo que deben hacer en tu ausencia. Es decir, los deberes de sus cursos o algunos juegos online con sus amigos, y no abrir la puerta a extraños, por ejemplo. Así el propio adolescente será consciente de su autonomía.

A la vez organiza todo para su protección y evitar accidentes. Deja notas por todo el hogar con el teléfono de contacto de la urgencia española al que llamar si pasa algo; algún papel con el funcionamiento de la cocina; o pedir al guarda de la residencia si puede pasar en tu ausencia.

Y un último consejo de seguridad, sobre todo cuando tus niños son todavía menores o un adolescente sin mucha autonomía. Esperemos que no, pero mientras los niños están solos en casa puede pasarte algo a ti. Así, asegúrate siempre de que tu pareja u otro contacto sepa que tu niño está solo en casa. También puedes llevar una nota contigo para que los servicios de emergencia conozcan rápidamente la situación.

Por lo tanto, dejar a los niños adolescentes solos en casa es un proceso natural que se construye con una educación con el paso de los años. Asistencia, supervisión y contacto, al principio. Y confianza, comunicación y observación, al final. Los adolescentes irán ganando poco a poco una madurez y autonomía que les permitirá quedarse solos con toda la confianza de sus progenitores.