Ansiedad en adolescentes: las mejores soluciones

¿Cómo reconocer los síntomas de la ansiedad y la depresión en adolescentes ?

Recientemente se ha presentado el Estudio PsiCE (Psicología en Centros Educativos) sobre la salud mental de los niños y jóvenes adolescentes españoles. De él se desprende que la ansiedad en adolescentes es una realidad preocupante. Tanto que el 15% de ellos refirieron síntomas de ansiedad graves, mientras que el 20% decía sentir síntomas de ansiedad moderados. Y peor todavía, el 6% tiene síntomas graves de depresión.

Las causas de la ansiedad en los adolescentes

En la adolescencia hay muchas cosas nuevas. Para empezar, los jóvenes dejan de ser niños para convertirse en adultos. Y esto conlleva exigencias y situaciones más estrictas en la escuela y la vida social, y cambios físicos importantes. Así, el bienestar de su día a día se degrada. Los exámenes, las emociones y los sentimientos están a flor de piel. ¡El estrés es insoportable para muchos!

El aumento de las hormonas o el estrés emocional ligado a cuestiones de identidad también alimentan la ansiedad. Así, muchos de los adolescentes al final sobrepasan sus límites y explotan. En este contexto, reconocer las causas de la ansiedad, la depresión o cualquier otro trastorno mental es fundamental para ayudar a las personas que los padecen.

Signos y síntomas de la ansiedad en adolescentes

El reconocimiento de los trastornos de ansiedad en los jóvenes no siempre es fácil. Los adolescentes pueden tener comportamientos exagerados y cambiantes desde niños. Esto hace que los adultos no presten atención y puedan considerar como normales un cambio conductual, cuando en realidad el adolescente tiene una ansiedad generalizada o depresión. ¡La información es el mejor remedio para ayudar a tus niños! Estos son los síntomas más comunes que debes observar:

• Estrés y nerviosismo excesivo que no pueden controlar, por ejemplo, para afrontar exámenes.
• Irritabilidad o enfado constantes ante cualquier situación.
• Dificultad para dormir, no tienen relajación.
• Problemas físicos, como dolores de cabeza, respiración difícil y fatiga.
• Pensamientos, emociones y sentimientos negativos.
• Ataques de pánico.

Soluciones para acabar con la ansiedad en adolescentes

Ya hemos visto que la ansiedad y la depresión son un trastorno mental y emocional. Y que los adolescentes que las sufren luchan contra comportamientos compulsivos y pensamientos obsesivos. Como adultos, para ayudar a tus hijos adolescentes a afrontar su ansiedad, lo que marca la diferencia no es librarse de la situación, sino reaccionar ante ella. ¡Debes tratar de aplicar estos consejos y estrategias!

Estrategias para tratar la ansiedad en los jóvenes

Existen varias estrategias efectivas para ayudar a tus hijos a superar la ansiedad. En muchos casos es un tipo de terapia que también funciona con adultos y niños. Después, por supuesto, tienen que tratar de aprender otras técnicas para gestionar de manera saludable el estrés o cualquier situación emocional complicada. Aquí hay algunas soluciones que pueden ser útiles:

• Terapia Cognitivo-Conductual (TCC). Basada en la psicología, esta terapia mental ayuda a los jóvenes adolescentes a identificar, afrontar y cambiar los pensamientos, sentimientos y emociones negativos que contribuyen a su ansiedad.
• Técnicas de relajación y respiración, como la meditación. La relajación puede ayudar a controlar los síntomas de ansiedad en situaciones de máximo estrés como los exámenes.
• Aprender a llevar un estilo de vida saludable. Se trata de una técnica conductual. Hacer ejercicio día tras día, una alimentación generalizada equilibrada y suficiente descanso puede ayudar a reducir los niveles de estrés y ansiedad en los adolescentes.
• Apoyo y atención social. El apoyo de amigos, familiares y profesionales de la salud mental va ayudar a tus adolescentes a enfrentar su ansiedad. También, animar a los adolescentes a compartir sus sentimientos y buscar ayuda cuando sea necesario puede ser esencial para su bienestar emocional.
• Evitar el consumo de sustancias. Cada vez más habitual entre los jóvenes adolescentes, el consumo de alcohol y drogas aumenta los síntomas de ansiedad y depresión. Es importante ofrecer información y educar a tus adolescentes sobre sus riesgos.
• Medicamentos. En determinadas situaciones, el médico especialista en salud mental o psicología puede prescribir medicamentos a los jóvenes para tratar su ansiedad.

Consejos para ayudar a un adolescente con ansiedad

“No es para tanto, no te preocupes todo irá bien”. Rechazar sus preocupaciones no ayuda. Y tranquilizarle tampoco es una solución duradera para el adolescente ansioso o depresivo. Lo primero que debes tratar de hacer es hablar con él para mostrarles que tomas en serio la situación y que le vas a ayudar a afrontar su trastorno mental. Sigue estos consejos: 

• Habla con tu hijo adolescente sobre su ansiedad. Escucha con atención sus pensamientos, emociones y sentimientos. E intenta también compartir tus sentimientos con él. Eso le dará confianza y ayudará al adolescente a identificar las situaciones que le causan ansiedad.
• Evita presionarlo con sus logros. Por ejemplo, no le impongas sacar unas notas determinadas en los exámenes. 
• Fomenta la autonomía de tus niños. Ayúdales a desarrollar habilidades para afrontar y manejar por sí mismos las situaciones que le causan ansiedad. Por ejemplo, con técnicas de relajación y respiración. 
• Compartir una vida saludable cada día. Tienen que aprender, con tu ejemplo, a realizar actividades físicas regularmente, descansar bien y evitar las drogas y el alcohol.
• Busca ayuda profesional. Si la ansiedad de tus niños es grave o interfiere en situaciones de su día a día y su bienestar, consulta a un especialista en salud mental.

En conclusión, la ansiedad en adolescentes es un problema tratable. ¡Y prevenible! Es básico mantener una relación sana con tus niños y fomentar en ellos una vida saludable. Los jóvenes adolescentes pueden aprender a controlar la ansiedad, la depresión y hasta el estrés, y evitar los síntomas de estos trastornos para vivir una vida plena y feliz.