Justificar una falta en el instituto: lo que debes saber

La importancia de justificar las faltas

Según la ley vigente, la educación básica, que incluye los años de colegio y el instituto, es obligatoria. Los padres son responsables de que sus niños acudan al colegio, y es el profesorado del centro el encargado de controlar la asistencia. La falta a las clases puede tener consecuencias para el niño y por eso es importante su justificación..

Consecuencias de no justificar las faltas

Las consecuencias negativas que el absentismo escolar puede tener son muchas. Las primeras, a nivel escolar. Y si a esto se le suma la no justificación de las faltas adecuadamente, el alumno también puede sufrir consecuencias disciplinarias. Estas son todas:

• Problemas de absentismo escolar. Cuando los alumnos faltan a las clases de manera regular, suelen tener problemas para ponerse al día con sus lecciones, deberes y exámenes. Les cuesta seguir el ritmo de sus compañeros y suelen sacar peores notas.
• Impacto en las calificaciones. Muchos profesores tienen en cuenta a la hora de calificar a los alumnos su participación durante las clases o la entrega de tareas, además del examen.
• Sanciones disciplinarias. El colegio o el instituto puede aplicar sanciones disciplinarias, como amonestaciones o trabajos extra, en caso de ausencias repetidas sin justificar.
• Anotación en el expediente académico. Muchos centros educativos reflejan en el expediente académico del alumno las faltas sin justificar.
• Pérdida de derechos académicos. En los casos más extremos, las faltas sin justificar o con excusas no válidas pueden conllevar la pérdida de derechos académicos, como la no presentación a exámenes o la no obtención del título.

El papel de los padres y los profesores

Los padres son responsables de que sus hijos se matriculen y asistan a una escuela. Son también los encargados de justificar sus ausencias. De hecho tienen siempre que firmar los justificantes de las faltas. En casos extremos que afecten a niños menores, si no justifican las faltas y evitan el absentismo de sus hijos, pueden incluso llegar a perder la patria potestad sobre ellos. Por otra parte, si las faltas están justificadas, deben desarrollar una buena comunicación con los responsables del instituto y apoyar a sus niños en la recuperación del trabajo perdido.

Los profesores, por su parte, también juegan un papel importante. El control de la asistencia del alumnado es una de las tareas principales que debe realizar el profesorado. Así, son los profesores los que deben avisar al centro cuando haya estudiantes que no han podido justificar sus ausencias de manera reiterada.

¿Cómo justificar las faltas de asistencia a las clases del instituto?

Aunque para todo alumno es obligatorio acudir a sus clases del instituto, hay situaciones en las que podrá ausentarse. Pero después deberá presentar una justificación de esa falta y seguir un procedimiento para ello. Y por supuesto, la excusa deberá ser válida. 

Motivos válidos para justificar una falta de asistencia

No vale cualquier excusa para justificar una falta en el instituto. Las faltas escolares pueden justificarse por diversos motivos, entre los que se encuentran:

• Enfermedad del alumno. Si el alumno está enfermo y no puede asistir a clase, es necesario presentar un justificante médico que acredite la enfermedad. Aquí se incluye la salud mental, pues las instituciones educativas están cada vez más conscientes de la importancia del bienestar mental del alumnado.
• Cita médica. Si el niño tiene una cita con el médico, o debe ir al dentista, por ejemplo, su falta estará justificada.
• Enfermedad o fallecimiento de un familiar. En caso de que un familiar cercano del alumno esté enfermo, requiera su atención o fallezca, también se puede justificar la falta.
• Deberes inexcusables. Existen algunos deberes que se consideran inexcusables, como la asistencia a un juicio o la participación en una competición deportiva oficial si es deportista.
• Otras situaciones excepcionales, como un viaje familiar imprevisto o una situación de emergencia.

Por el lado de las excusas no válidas, por ejemplo, podemos señalar la más típica: “Estoy cansado y no tengo ganas de ir al instituto”. Esta falta, claro, no se puede justificar. Como tampoco olvidar el horario escolar, quedarse dormido, faltar porque tienes un examen o por quedarse a ver un partido de fútbol en la televisión.

Pasos a seguir para justificar las faltas

El procedimiento para justificar una falta en el instituto puede variar según el centro escolar. Pero de manera general, estos son los pasos:

1. Comunicar la falta al instituto lo antes posible. Si sabes de antemano que vas a faltar un día concreto, avisa a tu profesor. Si tu ausencia es obligada por imprevisto médico, por ejemplo, debes comunicar la falta al instituto cuanto antes, ya sea por teléfono, correo electrónico o presencialmente.
2. Presentar el justificante de tu ausencia. En el plazo establecido por el instituto, tienes que presentar el justificante correspondiente que acredite el motivo de la falta.
3. Entregar el justificante a tu profesor. Si tu ausencia ha sido durante todo el día, entrega el justificante a tu profesor tutor. Si ha sido a una de las clases del día, da el justificante al profesor de la clase a la que has faltado para que se encargue de marcar tu falta como justificada.
4. Recuperación de clases. Después de justificar la falta, es importante que el alumno se ponga al día con el trabajo perdido. Habla con los profesores para obtener los apuntes y tareas que se realizaron durante tu ausencia. Así, además, por tu interés, verán que tu falta estaba justificada.

Documentación necesaria para justificar una falta

La documentación necesaria para justificar una falta en el instituto puede variar en función del motivo de la misma. Pero de manera general, hay que entregar un justificante firmado por los padres. Estos son justificantes válidos:

• Justificante médico. Cuando acudes a una cita médica o faltas a las clases por enfermedad, debes presentar un justificante médico. Asegúrate de que el justificante incluya la fecha y la firma del médico.
• Justificante familiar escrito. En ocasiones, una situación familiar puede requerir la ausencia de un alumno. Esto puede incluir eventos como funerales, bodas u otras emergencias familiares. En este caso, el justificante debe ser escrito y firmado por el padre, madre o tutor legal del alumno, y debe explicar el motivo de la falta.
• Documentación adicional. En algunos casos, el instituto puede solicitar documentación adicional, como un certificado médico, un certificado de defunción o una citación judicial. O si se trata de una actividad deportiva, un justificante firmado por el club y los padres. 

En resumen, las faltas escolares son una realidad común en la educación. Todos los alumnos han faltado alguna vez a sus clases. Por eso, es importante saber los motivos para justificar una falta en el instituto y cómo hacerlo. Es un proceso esencial para mantener una buena relación con el profesorado y evitar problemas de absentismo escolar. Y ya sabes, ¡necesitas un justificante válido y firmado por tus padres o el médico!